En principio aclaramos que un calefactor a leña da calor principalmente en el ambiente donde está instalado. A lo largo de las horas puede ir entibiando el aire de los ambientes contiguos, pero las paredes son límites que impiden el fluir del aire caliente.
Por lo tanto, cuando consultes en las fichas de los modelos debe tener en cuenta la superficie del ambiente con una altura normal de 2.50 m, no la de toda la casa. Si la altura es mayor debe tomar en proporción un aumento de la superficie a considerar. Por ejemplo, para una doble altura se considera el doble de superficie. Lo que se calienta es volumen de aire. Las aberturas vidriadas, los pasillos y cajas de escalera son factores de pérdida de calor.
La ubicación centrada del equipo en el ambiente favorece la distribución del calor. No es conveniente elegir muy justo, sino un equipo un poco mayor a lo indicado, ya que es difícil que se cumplan las condiciones ideales.